Tras una victoria espectacular de 11-4 en el Juego 4 de la Serie Mundial, los New York Yankees se dirigen al Juego 5 con un renovado espíritu de lucha y una confianza inquebrantable. El lanzador estrella Gerrit Cole, quien no fue utilizado en el Juego 4, espera ahora en la lomita con el objetivo de mantener el sueño de campeonato de los Yankees bien vivo.
La decisión de reservar a Cole para el Juego 5 fue una estrategia audaz por parte del mánager de los Yankees. En su lugar, el joven dominicano Luis Gil fue el encargado de enfrentar la temida alineación de los Dodgers, y lo hizo con creces. Gil no solo mantuvo a raya a los bateadores rivales, sino que también permitió a los Yankees prolongar la serie y mantener la esperanza de una remontada que sería recordada por las ediciones deportivas.
Gerrit Cole, con su actuación en el Juego 1 donde limitó a los Dodgers a solo una carrera en seis entradas, busca ahora repetir ese desempeño. «Aunque fue duro perder el Juego 1 en entradas extras, esto no ha disminuido nuestra motivación», señaló Cole. «Nos enfocamos en nuestro proceso, hemos trabajado todo el año para superar los bajones y mantenernos fuertes».
La confianza del equipo en Cole es palpable. «Cuando Gerrit está lanzando, sabemos que tenemos una gran oportunidad», expresó Jazz Chisholm Jr., el antesalista de los Yankees. «Es el mejor lanzador del mundo. Verlo allá afuera nos da tranquilidad».
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La historia, sin embargo, presenta un desafío formidable: ningún equipo ha ganado la Serie Mundial tras estar abajo 3-0. Solo los Medias Rojas en la Serie de Campeonato de la Liga Americana de 2004 lograron remontar un déficit de 0-3 en una serie postemporada al mejor de siete.
Con el partido programado para las 8:00 PM, Cole se concentra en una sola misión: mantener la temporada de los Yankees con vida y forzar un regreso del Clásico de Otoño a Los Ángeles. «Nos decimos que todo es posible», comentó Cole. «El enfoque está en lo que queda por jugar, en cada lanzamiento, en cada jugada».
El ambiente en el Yankee Stadium es de optimismo y tensión. Los seguidores de los Yankees miran a Cole no solo como su as, sino como su esperanza de hacer historia en el béisbol, prolongando una serie que ya tiene a todos al filo de sus asientos.
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