Con el despliegue de un operativo de búsqueda del presunto narcotraficante conocido como "Kiko la Quema", el municipio de Cambita se encuentra prácticamente en un estado de toque de queda, autodeclarado por los propios residentes debido al temor de enfrentar una posible balacera.
Como medida preventiva, se ha suspendido la actividad escolar en todas las escuelas de las comunidades que conforman el municipio de Cambita y Los Cacaos, en San Cristóbal. Esta decisión fue tomada por el director del Distrito Escolar 04-01, el profesor Jeremías Lorenzo, quien ha dispuesto la transición a la enseñanza virtual, similar a la implementada durante la pandemia de Covid-19, con el objetivo de resguardar la integridad física de maestros, estudiantes y personal educativo.
En el marco de este operativo, numerosos efectivos policiales y militares se encuentran en la búsqueda del individuo catalogado como extremadamente peligroso y vinculado al microtráfico.
La circular emitida el lunes 27 de noviembre insta a los equipos de gestión a implementar planes de acción basados en estrategias de educación a distancia, tutoriales, guías de estudio y otras medidas pertinentes para garantizar la continuidad de los procesos pedagógicos. Además, se establece una sección permanente de comunicación directa entre el equipo de gestión distrital, los directores de centros educativos y los docentes.
El temor palpable en Cambita se refleja en las acciones de las madres, quienes cierran sus puertas desde las 5:00 de la tarde para resguardar a sus hijos. Las rutinas en todas las comunidades han experimentado cambios significativos, y algunas empresas están adelantando la salida de su personal para garantizar su llegada segura a casa.
Varias personas consultadas expresaron su miedo tanto al delincuente perseguido como a las fuerzas del orden. Se señala la preocupación por las tácticas utilizadas, como entradas a viviendas con armas largas sin previos allanamientos. También se menciona la detención de familiares del delincuente, incluso menores de edad, quienes son llevados en la búsqueda.
Ante este panorama, la población manifiesta su deseo de que el individuo sea capturado pronto para poner fin a esta situación angustiante. Los dueños de colmados han anunciado el cierre temprano, y se han establecido retenes en diversos puntos, con la presencia de patrullas motorizadas y camionetas por toda la zona.
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