En los últimos meses, más de 200,000 haitianos se han visto obligados a abandonar sus hogares debido al asedio de las bandas que controlan parte de ese territorio, según un estudio realizado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). Ante esta situación, el Gobierno de Haití ha hecho un llamado a la comunidad internacional, solicitando la suma de 21 millones de dólares para mejorar las condiciones en los albergues y brindar servicios de protección a miles de personas.
Se ha informado que entre los desplazados, alrededor de 70,000 se encuentran en asentamientos espontáneos y en centros colectivos inadecuados y precarios. Además, 31,000 personas están durmiendo al aire libre, y otras 34,000 se encuentran hacinadas en aulas escolares, de acuerdo con datos de la Matriz de Seguimiento de Desplazamiento de la OIM (DTM).
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La situación se ha agravado debido a los sucesivos brotes de violencia en los vecindarios de Carrefour-Feuilles y Savanes Pistaches en Puerto Príncipe, lo que ha obligado a muchas personas a abandonar sus hogares. Estas personas cada vez más buscan refugio en lugares improvisados en lugar de quedarse con familias y comunidades de acogida, lo que conlleva desafíos adicionales.
La situación se ha visto complicada por el retorno forzoso de más de 115,000 haitianos desde países vecinos en 2023, muchos de los cuales carecían de una identificación adecuada, lo que dificulta su proceso de reintegración. Según datos de la OIM, casi el 22% de las personas repatriadas habían sido desplazadas previamente dentro de Haití, lo que resalta la necesidad de encontrar soluciones sostenibles a largo plazo para el desplazamiento interno.
La OIM y el Gobierno de Haití lideran conjuntamente la activación del Cluster de Albergues, que reúne a actores gubernamentales, agencias de la ONU y organizaciones no gubernamentales nacionales e internacionales.
Los miembros del Cluster están acelerando sus esfuerzos para distribuir rápidamente mantas, colchonetas, contenedores de agua, kits de refugio de emergencia y juegos de cocina a 70,000 personas. Además, se proporcionará equipamiento y reparaciones a un total de 53 centros colectivos para personas desplazadas, y se brindará asistencia en efectivo a 130,000 personas que están viviendo con familias de acogida. La OIM también está apoyando a las personas más vulnerables para que puedan trasladarse desde los lugares de desplazamiento hacia lugares de residencia más adecuados.
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