Kenia ha acordado desplegar 1.000 policías en Haití con el objetivo de ayudar a restablecer la normalidad en el país, que se encuentra sumido en una crisis de extrema violencia. El anuncio fue hecho por el ministro de Asuntos Exteriores keniano, Alfred Mutua, quien declaró que esta decisión fue tomada a petición del Grupo de Naciones Amigos de Haití.
En un comunicado difundido a través de su cuenta oficial de Twitter, Mutua señaló que Kenia aceptó considerar positivamente liderar una Fuerza Multinacional en Haití. El compromiso del país africano consiste en desplegar un contingente de 1.000 policías para asistir y formar a la Policía haitiana, así como proteger las instalaciones estratégicas en la nación caribeña.
Esta medida forma parte del esfuerzo de Kenia por solidarizarse con los afrodescendientes de todo el mundo y está alineada con la política de la diáspora de la Unión Africana y el compromiso panafricano de Kenia.
El ministro explicó que el despliegue propuesto por Kenia se concretará una vez que se obtenga un mandato del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y se realicen los procesos constitucionales kenianos necesarios. Además, se tiene prevista una misión de evaluación por parte de un equipo especial de la Policía keniana en las próximas semanas.
La situación en Haití es alarmante, con una extrema violencia que ha llevado a que gran parte de Puerto Príncipe y sus alrededores estén bajo el control de bandas armadas, obligando a miles de personas a abandonar sus hogares y convertirse en desplazados internos. Las masacres, violaciones, secuestros y quema de viviendas son frecuentes en este país, que también enfrenta una crisis en todos los ámbitos, con un alto porcentaje de inseguridad alimentaria y una gran parte de su población viviendo en la pobreza, convirtiéndolo en el país más pobre de América.
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