El Centro de Redes de Terremotos de China informó la mañana del 23 de febrero de un sismo de magnitud 7,2 en la zona fronteriza entre China y Tayikistán. El epicentro se ubicó aproximadamente a 60 kilómetros del poblado de Murghob, cuyo territorio está habitado por algo más de 7.000 personas.
De acuerdo con los datos oficiales, la profundidad del movimiento telúrico fue de 10 kilómetros. Las autoridades del país asiático están monitoreando la situación a fin de garantizar la seguridad de la población.
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